Es hijo de Hizashi y, por tanto, está "atrapado" en la rama secundaria del clan Hyuuga. Cuando su prima Hinata cumplió tres años, él fue marcado con el sello que bloquea sus habilidades y lo
convertía en familiar secundario. Cuando su padre se sacrificó para salvar a la rama principal, se obsesionó con que el destino nos marca irremisiblemente y odió a la rama principal. Cuando se
convirtió en gennin, fue el más destacado de su promoción gracias al uso del Juuken ("puño ligero"), un rápido estilo de lucha basado en causar daños internos a los rivales por medio de chakra.
Gracias a su buen uso de la técnica ocular Byakuugan, este estilo de lucha no tenía secretos para él. Su técnica lo convertía en rival de su compañero de equipo Leee, el cual usa golpes externos
basados únicamente en el Taijutsu. Gracias a su Byakuugan y el dominio del chakra,es capaz de generar una "defensa absoluta" que lo hace casi inaccesible a media y larga distancia (su rango de
visión al principio era casi de 360 grados, en Shippuden muchísimo más). Al año siguiente participó en el examen Chuunin y pudo enfrentarse a su prima Hinata. Aprovechó para recordarle que ella
es una cobarde incapaz e intentó humillarla a base de golpes. Él se empeñaba en decir que el destino no se puede cambiar y que "un fracasado es un fracasado". Su técnica superior hizo que Hinata
mordiera el polvo y estuviera a punto de morir, pero ella resistió todo lo que pudo con valentía. En las siguiente ronda se enfrentó a Naruto, que aunque lo pasó mal pudo derrotarlo a base
de duro esfuerzo. Esto abrió los ojos de Neji, al que su tío Hiashi pidió disculpas por todo lo que había sufrido en el pasado. Él le dio la nota póstuma de su padre, que sirvió para que Neji
dejara de pensar en el destino como algo imposible de superar. Su siguiente combate fue durante la operación de rescate de Sasuke. Se enfrentó a Kidomaru y, aunque éste estuvo a punto de matarlo
con sus flechas, usó todo su dominio del chakra para acabar con él de una fuerte descarga. Tres años después, fue con sus compañeros en busca de la guarida de Akatsuki. Ayudó a Lee, TenTen y Gai
a derrotar al doble de Kisame y luego se enfrentó a un doble suyo aparecido tras abrir la puerta de Akatsuki.
Nuevamente con la aparición de Pain en Konoha, Neji y sus compañeros se encontraban fuera en una misión. Por intuición, pudieron percibir que había peligro y regresaron a la Aldea (aunque no
pudieron ayudar por culpa de Katsuyu)
Lo más triste es sin dudas, su muerte ante Obito en la cual se sacrifico para salvar a Naruto y Hinnata.